No
sabes cuanto te amo... ¿Verdad?
¡Mírame!
Toma mi
mano y apriétala. No la sueltes.
No
dejes de mirarme... te hablan mis ojos
transparentes
y profundos
alcanzables
y penetrables.
Arrójate
dentro de mí
y cuando
roces mi alma y sientas un escalofrío
te
darás cuenta ahí, recién ahí
de la
desesperación que me produce pensar no tenerte
de como
quedaría mi mundo arrasado por tu ausencia
lleno
de objetivos y sueños desnutridos
sin
verdes, ni rojos, ni azules... sólo grises
como el
gris de mi larga sombra, larga y gris ceniza.
Sentirás
mi desolación, me verías morir
sin ti,
de pena
me verías
morir.
Ahora
sabes cuanto... ¿Verdad?
ChicoMalo
17-02-2009